¡Hola y bienvenidos al fascinante mundo del Pitch y las presentaciones cortas!
Antes de adentrarnos en este tema, es crucial comprender qué es exactamente un Pitch. Derivado de la palabra inglesa “speech”, un Pitch implica lanzar un mensaje de manera poderosa, asertiva y concreta, similar a cómo un lanzador de béisbol presenta la pelota en el campo de juego. Al igual que un tráiler de película, tu Pitch debe ser enérgico, entusiasta y mostrar lo mejor y más impactante de tu idea, abriendo un mundo de posibilidades en un tiempo limitado.
Durante el día, surgen numerosas oportunidades para establecer relaciones y presentar tus ideas a diferentes interlocutores. Por lo tanto, es crucial equiparte con habilidades y técnicas para presentar tu idea con verdadero impacto en este dinámico ecosistema.
Antes de seguir adelante, déjame plantearte una pregunta: ¿Con cuánta frecuencia estás verdaderamente preparado para presentarte? ¿Crees que logras impactar con tus palabras, cómo las expresas y en el momento oportuno? ¿Estás listo para comunicar tu mundo en tan solo 30 segundos? Porque, sin importar lo brillante que sea tu idea, su valor se reduce considerablemente si no puedes comunicarla de manera efectiva.
El arte del Pitch radica en hacer una apertura fuerte y convincente desde el primer instante. Los primeros 10 segundos son cruciales, ya que marcan la diferencia en la atención de la audiencia. Posteriormente, tienes un minuto adicional para cautivar y dos minutos más para asegurar una reunión adicional. Pero, ¿cuál es tu objetivo real al realizar un Pitch? Antes de comenzar, es fundamental hacerte esta pregunta. No busques simplemente un “sí” como respuesta, ya que el propósito de un Pitch va más allá de eso.
El objetivo de tu Pitch no es solo que alguien diga “sí” a tu proyecto y te dé el dinero al final de tus 3 minutos. Si estás buscando levantar capital, es poco probable que salgas con el dinero en la mano después de tu presentación. Sin embargo, lo que debes buscar es provocar el interés en la persona que te está escuchando, despertar su deseo de conocer más sobre tu proyecto. Debes lograr que la gente no solo quiera tu idea, sino que también quiera asociarse contigo.
El Pitch tiene la capacidad de abrir la puerta a una segunda oportunidad, de lograr una reunión adicional, obtener un contacto o un correo electrónico. Por lo tanto, es importante tener en cuenta cuáles son las expectativas reales que puedes lograr con tu Pitch.
Tu audiencia puede incluir socios potenciales, inversores, proveedores, mentores, colaboradores o cualquier persona interesada en tu proyecto. Adaptarás tu Pitch según las necesidades de esta audiencia, pero en términos generales, lo que vamos a discutir son algunas plantillas y modelos que debes tener en cuenta al diseñar tu Pitch.
Es esencial recordar que las personas que escuchan Pitch están acostumbradas a escuchar cientos de ellos, por lo que debes destacarte con tu pasión, entusiasmo y tu enfoque único y personal. El secreto de un buen Pitch no está tanto en lo que dices, sino en cómo lo dices y cómo te presentas.